Entre tanto la situación entre las dos figuras representativas del partido y que buscan su continuidad política y protagonismo, como son Luís Fernando Ochoa Zuluaga y Guillermo Rivera Flórez, continúa en los escenarios públicos y los medios de comunicación.
Se ha conocido de propia voz del representante Rivera Flórez, que se habrían confirmado los cargos contra el Gobernador Felipe Guzmán lo que reabre la puerta para la toma de decisiones de parte de los organismos de control. El Partido Liberal ha expulsado a Ochoa Zuluaga de la colectividad, con el argumento de la moralidad al verse aparentemente “involucrado” en el tema de beneficio a los oferentes cuando era Director de la entidad que firmó el convenio de “Las Cajas” y que ahora lo pondrían a buscar otro partido político, para continuar con sus aspiraciones.
Las quejas por los altos costos invertidos por la lista uno de la consulta del domingo no se han hecho esperar y ahora se reta al propio Ochoa para que haga público los libros de gastos. Entre tanto algunos seguidores de Ochoa manifiestan que es hora que Rivera haga silencio y no “llore tanto”, que ante cualquier moviendo de su contendor político sale a los medios a refutar cualquier cosa. Si bien es cierto Guillermo Rivera que hace frente solo y da respuestas a todo cuestionamiento, Ochoa tiene a disposición un batallón conformado por asesores, abogados y personas que se encargan de esas labores propias de su puja personal.
Son 14.304 votos por la lista uno, frente a 10.732 de la lista dos. Eso representaría una proporción de dominio de la lista uno en el partido del 25%, en el caso del directorio departamental, pero no en algunos municipios como el caso de Orito y Mocoa como la ha reconocido el propio Fernando Ochoa. “No fue un dominio contundente afirmo Rivera Flórez”.
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